Poner en marcha el sistema de gestión del garAJE, sede de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Madrid, ha sido uno de los retos más apasionantes y, por qué no decirlo, duros de mi vida profesional.
Las dificultades para encajar los recursos de los que disponíamos con los servicios punteros a prestar requirió de un esfuerzo inmenso, que no hubiera sido posible sin el magnífico equipo de AJE Madrid: trabajadores, comisión ejecutiva y socios.
Un inmenso orgullo
Fue uno de los primeros espacios de este tipo en ponerse en marcha en la ciudad de Madrid y, aunque la competencia era muy dura, pues la mayoría inmensa eran empresas privadas las que gestionaban los espacios, nosotros éramos una asociación sin ánimo de lucro que tenía que prestar un servicio a la sociedad, pero el celo y el esfuerzo del equipo lograron suplir esa dificultad. Como prueba, en este enlace la revista Skyscanner lo define como uno de los 15 espacios de coworking más cool del mundo, o en este otro enlace la Agencia Europa Press lo cataloga como uno de los 10 mejores espacios de España (en la foto, salgo yo en ese momento de mi despacho, la furgoneta del garAJE).
Revistas especializadas o agencias de noticias catalogaron al garAJE como uno de los quince espacios de coworking más cool del mundo o uno de los diez mejores de España.
Durante más de mil días, y miles de horas, tuve la oportunidad de compartir momentos con personas que admiro o las que me causaron especial impresión (en las imágenes se ven algunas), pero sobre todo tuve la oportunidad de palpar y sentir directamente el inmenso talento emprendedor que existe en nuestro país. El garAJE y todo lo que viví allí me hizo, sin duda, mejor persona y mejor profesional.